miércoles, 17 de marzo de 2010

HUNDIDA

Cuando estiras tanto una cuerda que parece que se va a romper del fino hilo que queda, cuando luchas y lloras y berreas y gritas para que no se rompa, porque tú no quieres que se rompa, pero siguen tirando… hasta que se rompe y caes, y te hundes, y todo es oscuro, y estas sola, y quieres salir pero no puedes, y de repente te sientes bien ahí abajo, sin nadie, triste pero sin que nadie pueda hacerte más daño, protegida, sin ganas de hacer nada, cómoda, calentita... Cuando sólo quieres estar ahí, en tu pequeño hoyo, sola, todo te estorba…

No hay comentarios:

Publicar un comentario