Disturbio, hojas revoloteando en espiral se alejan de mí. Camina: lento. Lento y descalzo, clavándose cada retorcijón del camino, pero camina, y sigue caminando. Revoltosas voces de alegría revuelven su estómago. Tiene hambre. Cabizbajo, continua, absorbiendo cada beso de su memoria. Pega un salto, una innovación en su camino, y dibuja una sonrisa en la cara. Sigue caminando, y levanta la mirada y se encuentra a su camino, desolador, y vuelve a abajar la mirada. Camina, camina lento pero camina . . .
No hay comentarios:
Publicar un comentario